Ebenopsis ebano es un árbol de la familia Leguminosae y género Ebenopsis. Originario de la costa occidental del Golfo de México, su nombre común en español es ébano. Sin embargo, no se le ha de confundir con árboles de la especie Diospyros ebenum, originarios de la India y cuyo nombre común también es ébano.
El ébano es endémico de Tamaulipas y el extremo sur de Texas, así como Nuevo León, San Luis Potosí y Veracruz, y áreas aisladas en la Península de Yucatán.[1] Se le encuentra en toda la planicie costera de Tamaulipas, particularmente a altitudes bajo los 500 metros[2] y es la especie característica de la selva baja caducifolia espinosa que domina la Huasteca Tamaulipeca y costa de Tamaulipas. Se presenta igualmente en ecosistemas de la región como el matorral alto, palmar, pastizal arbosufrutescente.[1] Prefiere los suelos profundos y llanos,[2] arcillosos y frecuentemente con una capa de arcilla impermeable a poca profundidad y con problemas de drenaje.[3]
La especie está catalogada como de preocupación menor
Se trata de un árbol cuya copa llega a alcanzar hasta los 15 metros de altura en su madurez. Posee un tronco recto con hasta 80 cm de diámetro, de corteza color pardo obscuro, con ramas gruesas y ascendentes, las ramas jóvenes tienen espinas pareadas de color gris claro. Las hojas, dispuestas en espiral se aglomeran sobre cada par de espinas. El tamaño de las hojas es de 2.5 a 6 cm de largo, y son doblemente compuestas; primero por 4 a 6 foliolos que a su vez contienen de 4 a 12 foliolos secundarios, opuestos y pegados a la ramilla central, de 3 por 1.5 mm. Alcanzan tamaños hasta de 12 por 6 mm.[3] Estos foliolos son de color verde obscuro, aunque en el envés suelen ser más pálidos. La copa es densa y obscura. La floración ocurre en dos periodos: de junio a julio y de octubre a noviembre. Las flores, tienen forma de estrella, alcanzan unos 5 cm de largo[3] y son de color crema-verdoso, florecen en espiga y dan lugar a un fruto en forma de vaina, leñosa, con 6 a 12 semillas, cada una con una marca lineal en forma de herradura.[1]
Es de lento crecimiento y muy tolerante a temperaturas extremas, si bien requiere agua abundante en verano.[2] Su alta adaptabilidad y capacidad para la formación de suelos la hacen una especie ideal para plantaciones de restauración y reforestación.
Las vainas y semillas son susceptibles a daños por insectos brúquidos Algarobius prosopis, que se desarrollan durante su etapa larval en las semillas. También es atacado por Chlorochroa ligata y ácaros Tetranychus pacificus. Sufre además la incidencia de hongos Cercospora prosopidis, Leveillulla taurica, Phymatotrichum omnivorum.[4]
Ebenopsis ebano es un árbol de cuyo polen y néctar las abejas producen una miel clara. Desde los 6 a los 25 años se puede aprovechar su madera,[3] que se usa en edificaciones rústicas rurales y en la fabricación de mobiliario, mangos para cuchillos finos, construcciones marinas, poleas para uso industrial, pisos industriales, artículos decorativos. Asimismo se emplea en la producción de carbón de excelente calidad. Se le cultiva en los ranchos deliberadamente porque proporciona sombra y forraje al ganado.[5]
La especie fue descrita por primera vez por Jean Louis Berlandier en la primera mitad del siglo XIX, y obtuvo su taxonomía actual de los botánicos Rupert Charles Barneby and James Walter Grimes. Ebenopsis proviene del griego ἔβενος (ébano), y ὄψις (vista).
Ebenopsis ebano es un árbol de la familia Leguminosae y género Ebenopsis. Originario de la costa occidental del Golfo de México, su nombre común en español es ébano. Sin embargo, no se le ha de confundir con árboles de la especie Diospyros ebenum, originarios de la India y cuyo nombre común también es ébano.